Seguramente los kilómetros de años atrás han ido haciendo huella, hasta el punto en el que tengo la sensación de que se termina mi etapa de corredor de largas carreras montaña.
También influyó comenzar la temporada con carreras largas, como el ultra Trail de Les Fonts, carrera de 105km en 3 días.
Allí coincidimos algunos amigos sufridores de estas cosas, Mario, Javier, Pablo y alguno más.La primera etapa es una nocturna, a la que casi no llego por que me confundí de pueblo, me fui a XERT y no XERTA. Pero al final y conduciendo fuera de la ley, llegue 40´ antes de la salida (21 horas); veinti pocos kilómetros hechos con frontal, con mucho ambiente y no mucho desnivel, así que en un par de horas o poco más llegaba a la meta.
Al día siguiente a las 5 arriba y salida a las 6. Cincuenta y tantos kilómetros de carrera y dos mil y muchos metros de desnivel. Un paisaje bonito, caminos muy rotos en ocasiones, temperaturas bajas y calambres a partir del km 20, que por un momento me hicieron pensar en la retirada. Las rodillas me empiezan a pinchar pero no lo suficiente para parar, así que llegada a meta sobre las 3 de la tarde o eso es lo que recuerdo porque tampoco tengo los tiempos parciales de las etapas.


Cresteando en los puntos altos de la carrera y con esa sensación de estar perfectamente adaptado a ese medio, saltando de piedra en piedra y con la alegría de estar donde en ese momento quieres estar. Estas sensaciones van cambiando conforme pasan las horas, el empuje se esfuma, el ánimo se desvanece y comienza la batalla personal en la que no siempre ganas.
Al final de los tres días de carrera recogemos nuestros diplomas. Ahí están Mario y Javier, Ramón por detrás al que siempre echo en falta si en alguna de las carreras no está. Sabes que cuando él está habrá una buena crónica de la carrera y tendrás una buena foto en algún punto estratégico de la misma. Un gran tipo Ramón (Su blog, monrasin - corriendo por la sierra)
En ese fin de semana, con tres días de carrera, sumamos 105km, 5250 mts de desnivel positivo y un total de 14h 46´, en mi caso y en la clasificación general, puesto 55, creo que estábamos unos 150 más o menos., no lo recuerdo bien.
Hasta la cola de Caballo había llegado en otras ocasiones dando algún paseo, pero desde allí hasta Goriz no había vuelto a pasar desde que lo hice por primera vez en el año 79. El calor se siente, pero las ganas de llegar a la cumbre son más fuertes.
El Cilindro de Marboré desde la cumbre del Perdido, creo que me llevó unas cuatro horas y media llegar a la cimaVídeo del tramo llamado Escupidera, peligroso en invierno o con nieve dura.

Más panorámica desde la cumbre, con una visión de los valles que rodean a este macizo que es sobrecogedora. Y vuelvo a ver a ese niño rubiete que era yo en aquella primera vez que subía a este Pico. Con la misma emoción a pesar de los años, con menos miedo ahora que entonces y sintiendo la recompensa por ese esfuerzo, la recompensa de poder ver el mundo de las montañas desde ahí arriba, la recompensa en forma de felicidad por llegar a conseguir algo que un día pensé.
Recuerdo que durante la subida entre el bosque, antes de llegar a la cola de caballo y tratando de conseguir trotar en esas pendientes, oigo como una mujer con voz alta y clara me dice: "vaya esfuerzo tan inútil"; y que razón tenia la mujer, ese hecho simple de tratar de correr en ese medio, someter el cuerpo a esa extenuación, partir como un pura sangre y volver arrastrándome, no tenia utilidad alguna. Como no la tiene sacar a una virgen o a un santo sobre un trono a pasear por la calle o llevar una cruz a las espaldas por penitencia o hartarse de cervezas y hasta las tantas de la mañana (algo que también hago alguna que otra vez) y otras tantas cosas inutiles a ojos de los demás que rodean nuestras vidas. Esta mujer se olvido antes de exclamar aquello, preguntarse o preguntarme el porqué hacía eso. Se olvido pensar porqué ella misma se encontraba andando por ese camino. No dije nada y continué en mi empeño, por que era el mío, mi penitencia, mi religíón, mi felicidad.Llego el día de la Subida al Veleta, el 7 de agosto del 2011. eran 50km y unos 2700 mts de desnivel positivo, con llegada justo por debajo de la cima del Veleta y a unos 3200 mts de altura.




Llegué a la meta en 5h y 41´ y en el puesto 100 de la clasificación general. Las rodillas se resintieron pero pude terminar.
Años atrás se hacia el Aneto X-treme, maratón de montaña que salia de Benasque y llegaba a la cumbre del Aneto para volver a bajar hasta Benasque y que un buen año, creo que sobre el 2000 se dejó de hacer y ya no me pude apuntar
Así que me quedé con las ganas de completar ese recorrido e incluso la idea se llegó a dormir. Pero el verano pasado se despertó y al fin de semana siguiente al de "AL ANETO HEMOS DE IR", me planteo llegar a la cumbre desde Benasque y bajar.
Y que divertida es la cámara de vídeo
Fue un día caluroso
II carrera de montaña Valle de Pineta. Una carrera encantadora con 24,5km y 1500 mts de desnivel positivo, esta vez 2h 52 y en la clasificación general el 18. Primera carrera de montaña para mi hermano Enrique, sudó lo suyo pero llegó.






Al dia siguiente al C1 a unos 5200mts, notamos como la climatación es mejor, a esta altura ya nos movemos con más holgura. Tan solo Israel tiene que volver al CB, pues tiene problemas de estomago bastante fuertes, alguna comida o bebida, no le cayó bien al cuerpo.
La misma frase dicha en el CB antes, se repite en el C1. Que dos moles son los Hascaranes, a la derecha el sur más alto, a la izquierda la Norte unos 200 mts menos.
Huascaran Sur (6768mts) ¡Vigilandonos!
Merece la pena llegar al C1 ¿o no?